Al personal de la salud que lucha contra el nuevo coronavirus,
a quienes tratan de tú a tú la enfermedad,
y a todos quienes laboran así sea de forma no especializada en los mismos espacios:
acepten nuestra gratitud.

Hagamos un recorrido sobre algunas, solo algunas, de las películas que se valieron de la buena música en forma muy acertada, tanto que nos quedaron indeleblemente registradas.

De Sueños de libertad a Canzonetta sull'aria

Sueños de libertad, de Franck Darabont (The shawshank redemption, 1994, con todos los títulos que usted imagine según los países donde se exhibió), tuvo la mala suerte de aparecer a la vez de dos películas que hicieron historia y opacaron su resplandor. Ellas fueron Pulp fiction y Forrest Gump.

El argumento trata la vida en prisión de Andy Dufresne (Tim Robbins) preso por un delito que no cometió, su entrañable amistad con Red (Morgan Freeman) y los planes de fuga del primero.

Una película concentrada en la vida en prisión incluye, para nuestra sorpresa, un pasaje de ópera. Es esta escena de Sueños de libertad, de Franck Darabont, con acordes de «Canzonetta sull’aria» de Las bodas de Fígaro, de Mozart.

Aquí se puede ver completa en la película de Jean Pierre Ponnelle, Las bodas de Fígaro (1976). La versión es de la Orquesta Filarmónica de Viena dirigida por Karl Böhm, con Kiri Te Kanawa y Mirella Freni como sopranos.

De La Misión a la Suite de la Misión

Roland Joffé nos plantea en La Misión (1986) una historia de aborígenes, colonialismo, esclavitud, religión, sociopolítica, Amazonia…

En la escena que veremos, el padre Gabriel (Jeremy Irons) camina con su comunidad de indios guaraníes teniendo enfrente a las fuerzas armadas que vienen a sofocar la libertad de aquellos sus fieles. Otro hermano adherente de esta comunidad, Mendoza (Robert de Niro), se apresta por su lado ante el ataque.

El padre Gabriel avanza portando el santísimo sacramento, cae abatido por las balas, uno de los aborígenes recoge el sacramento...

Escenas de La Misión de Roland Joffé, con acordes de la Suite del mismo nombre de Morricone pueden verse aquí.

El soundtrack de la película forma una suite llamada también La misión, escrita especialmente, que se convirtió para su público en una de las obras más entrañables del autor, Morricone.

En este enlace se puede disfrutar de La misión, suite de Morricone, orquesta dirigida por el propio Ennio Morricone.

De Manhattan a Rhapsody in Blue

Woody Allen plasma en Manhattan (1979) su devoción por la urbe de hierro. Desde el arranque de la película acompaña sus reflexiones con una obra representativa del espíritu estadounidense que no podía ser otra más que la elegida: Rhapsody in blue.

Véase aquí el inicio de Manhattan de Woody Allen con acordes de Rhapsody in blue de Gershwin.

Ahora, completa: Rhapsody in blue de Gerswhin; Orquesta Filarmónica de Nueva York dirigida desde el piano por Leonard Bernstein.

Manhattan es una muestra de las grandes capacidades del director –también actor de la película. Se da el lujo de filmarla en blanco y negro, acompañándola del jazz que es otra de sus pasiones –músico él mismo y por cierto ejecutante en esa ciudad. Es el Woody Allen que pasó de las películas chuscas a Interiores y luego a esta obra.

El argumento aborda la historia de un hombre que ama a su esposa, a otra mujer y a una más mientras nos hace partícipes de sus reflexiones a cada paso que da.

De Barry Lyndon a Sarabanda

Stanley Kubrick deslumbró al mundo con una película exquisita: Barry Lyndon (1975).

Es inevitable repetir el lugar común: cada toma de ella viene siendo una pintura, una estampa, por la belleza que le imprimió el cineasta gracias a su formación de fotógrafo y al innovador filtro que usó en la cámara.

Otro rasgo de su belleza es la música. Junto a obras de cortes diversos, puso sobre la mesa Sarabanda de Händel que el común de aficionados a la música desconocía. Un ingrediente más: a lo largo de película se toca varias veces pero en distintos timbres.

Como mucho del arte, que nos impresiona antes que entenderlo, el argumento de la cinta pasa a segundo término frente a todo lo anterior; sin embargo, para mencionar su trama en una palabra, Barry Lyndon es la historia de un arribista.

En el siguiente enlace un reciente tráiler de Barry Lyndon con acordes de Sarabanda de Händel.

Aquí una versión completa de Sarabanda, de la Suite para clave en re menor HWV 437, de Händel; Orquesta Filarmónica de Lucca, director Andrea Colombini.