El cantante comenzó su gira de 2024 por Uruguay para luego seguir su recorrida por otros países de América Latina. El músico, de 82 años, se presentó por tercera vez en este país el martes 1ro. de octubre. Luego su recorrido seguía por Argentina, Chile, Brasil, Perú, Colombia, Costa Rica y México. Su gira cerró el 17 de noviembre en la Ciudad de México.
Entre la lista de artículos que pidió el músico se encuentran: frutas, verduras y lácteos, bebidas con y sin alcohol. Solicitó cebollas, manzanas, ajo, melón, jengibre, entre otros. Además pidió 5 kilos de frutas tropicales o nativas. También, la lista incluyó leches –enteras, descremadas y vegetales–; carne sintética, (salchichas y hamburguesas de origen vegetal, y “pollo falso”). También el equipo pidió agua de coco, refrescos y botellas de té verde. Asimismo, entre la lista estaban los “bagels frescos” de “buena calidad”.
Las compras fueron hechas en territorio uruguayo y su menú consistió en comida vegetariana. Se esperó que Paul, junto con su esposa Nancy, viajaran a Punta del Este para andar en bicicleta. El equipo y los instrumentos musicales fueron trasladados en avión y 15 camiones. La producción del emblemático músico se encargó de traer fuegos artificiales y las pantallas porque no hay similares en la región.
La leyenda del rock, más vivo que nunca, deleitó al público con su show denominado “Got Back”. El recital tuvo una duración de tres horas y cantó 37 canciones. El espíritu en el Centenario era de adrenalina y felicidad. Desde niños a adultos formaron parte del público. La banda telonera en Uruguay fue “Los hermanos láser”. Alrededor de las 21:20 se apagaron las luces del estadio y el show de Paul dió inicio a las 21:22.
Paul, junto con su banda, prometieron una “fiesta” y cumplió tocando viejas y nuevas canciones demostrando su gran trayectoria. Había varias colas de fila antes de entrar al Centenario y el público la vivía con mucha ansiedad. El show pactado para las 21:00 sufrió unos minutos de retraso y el público no dejaba de ingresar.
El bajo Hofner acaparó las pantallas laterales del escenario. De esta manera arrancó fuerte y seguro con “A Hard Day’s Night”, seguido de “Junior's Farm”. Su calidez fue constante para con el público. El artista trató de hablar en español y ante cada intento fue ovacionado, a pesar de contar con la ayuda de un telepronter.
Dentro de la banda del británico, se hace mención a dos grandes músicos: Brian Ray y Rusty Anderson, quienes intercambiaron la guitarra y el bajo durante el espectáculo e hicieron su trabajo con creces. Ray, además, hizo gran parte de los coros. “Letting Go”, “She’s a Woman”, “Got to Get You Into My Life” y “Come On To Me” no solo aumentaron la curva de intensidad, con palmas del público, sino que tuvieron lugar los instrumentos de viento.
La banda de McCartney mostró todos sus matices en cada cambio de instrumentos. No faltaron las dedicaciones a John Lennon, con “Here Today” y luego cuando interpretó “Blackbird”, y a Jimi Hendrix con “Let Me Roll It”. No faltó el piano que brindó sensibilidad a la noche fría montevideana. “Let ‘Em In”, de Wings, y “My Valentine”, dedicada a su esposa Nancy, fueron seguidas por “Nineteen Hundred and Eighty Five”, que aumentó el ritmo por unos instantes.
El público uruguayo, que fue de todas las ciudades, reclamó las viejas canciones de The Beatles: “I’ve Just Seen A Face”, “In Spite of All The Danger” y, especialmente, “Love Me Do”. Frente a las vallas de seguridad, el público de la tercera edad bailaba, hacían el twist y el tiempo parecía haberse congelado. A su lado, nietos, nietas, hijos e hijas. ¡Una fiesta, realmente!
Abe Laboriel, músico mexicano, deleitó al público en la percusión. No solo tocó la batería, sino que hasta bailó la macarena en “Dance Tonight” al ritmo del mandolín británico. Hacía muecas y gestos en el transcurso del show, de esta manera se ganó la simpatía del público. Todo esto muestra la solidez de la banda que disfruta tocar en conjunto.
El ex Beatle redobló la apuesta con “Now And Then”, “la última canción de los Beatles”, lanzada en 2023. Uruguay tuvo el honor de ser el primer país donde se tocó en vivo. Mientras se interpretaba, en la pantalla se podían ver diferentes fotos y videos de los integrantes de la banda.
Durante el show no faltó cambios de guitarra, y estuvo presente la mandolina. En un momento, solo hubo tiempo para clásicos: “Get Back” y “Let It Be” fueron los introductores a la locura del público. “Live and Let Die” estuvo acompañado por fuegos artificiales, propulsores de fuego, humo y el inmenso set de luces iluminando un rojo intenso. No faltó “Hey Jude”, entre las 37 canciones del repertorio.
“Nos vemos la próxima”, dijo antes de retirarse. Desde Uruguay, y otras partes del mundo, no solo se espera que esta leyenda del rock siga viva, sino que continúe latiendo los corazones, haga bailar los pies y enriquezca el espíritu de muchas generaciones.