Estamos en la consulta de la doctora Conchita Mir para hablar del tema del envejecimiento, algo que preocupa a la mayoría de las personas cuando llegan a una determinada edad. Ella nos da pautas para revertir el envejecimiento y durar los máximos años posibles con la mejor calidad de vida. Lo importante no es lo jóvenes que seamos, sino lo jóvenes que nos sentimos y eso es algo que hay que cuidar desde dentro.

Doctora, ¿qué es el envejecimiento?

Es la acumulación de daños a lo largo del tiempo, esto se ve reflejado en el acortamiento de los telómeros, que es la parte final de nuestros cromosomas. Cuanto más corto está un telómero, más prematuro es nuestro envejecimiento. Este acortamiento viene determinado por nuestro estilo de vida y nuestra genética.

¿De qué manera influye la genética y nuestro estilo de vida a la hora de envejecer?

Hasta hace unos años se pensaba que toda la información estaba en nuestros genes, y la manera de envejecer se podía prever a través de ellos. Hoy en día se sabe que la genética determina, pero solo un 30%, el resto depende de nuestra epigenética, es decir, de todo aquello que hacemos para que nuestros genes se enciendan o no, por ejemplo: llevar una correcta alimentación, practicar deporte, las horas que dormimos, cómo gestionamos el estrés, la exposición a los tóxicos, etcétera.

Es decir, por un lado, tenemos nuestra edad cronológica, que es la que indica nuestro DNI, nuestra fecha de nacimiento; pero, por otra parte, está nuestra edad biológica, la que marcan nuestras células. Lo importante es conseguir que nuestra edad biológica sea menor que la cronológica, así envejeciendo más lentamente.

¿De qué manera ayuda a sus pacientes a revertir el envejecimiento?

En mi consulta trato a cada paciente de manera individual y adecuo el tratamiento en función de la problemática a tratar. En reglas generales, cuando nos vamos haciendo más mayores, cada vez es más complicado limpiarnos por dentro, es decir, deshacernos de los radicales libres, los deshechos proteicos, la contaminación… Yo siempre digo, que desaceleramos el envejecimiento cuando limpiamos nuestra mitocondria y paramos el decaimiento hormonal.

Y ¿de qué manera?

Por ejemplo, si a la persona le faltan oligoelementos, una buena solución es aportar multivitamínicos.

Si se sienten muy cansados, significa que hay mucha oxidación y los trato con antioxidantes, como el ubiquinol, el superóxido dismutasa…

Les compruebo el PH para ver si están ácidos y los equilibro con una correcta alimentación, siempre ecológica, evitando los procesados y apoyándolos con suplementos.

Podría enumerarnos sus suplementos favoritos…

Hay muchos, depende de lo que queramos tratar y a quién, pero entre mis preferidos están algunos hongos medicinales adaptógenos, como el reishi, es el llamado «hongo del antienvejecimiento», un potente antioxidante que nos ayuda a no engordar, mejora nuestra inmunidad y nuestra respuesta al estrés y la ansiedad.

O el Cordyceps, otro hongo, utilizado por los atletas chinos para ganar en vitalidad. También mejora la libido tanto de hombres como de mujeres y hace no perder capacidad ósea.

Otro de mis favoritos es la melena de león, que actúa en el eje neuronal-gástrico, mejora la permeabilidad intestinal y cognitiva, entre otras muchas propiedades.

Si entramos en el mundo de los ácidos grasos, que son más recomendables para temas inflamatorios y de la salud cardiovascular, está el EPA y el DHA. El aceite de krill combina estos dos ácidos grasos, mejor que otros, ya que se extrae de pescados pequeños que son menos contaminantes por contener menos metales pesados.

El resveratrol es otro gran antioxidante y cardio protector, un polifenol que proviene del cacao y del vino tinto, que activa las sirtuinas y nos da mucha energía, nos previene de enfermedades autoinmunes, disminuye el peso corporal, mejora la resistencia a la insulina, sirve para evitar cáncer de próstata y mejora algunas enfermedades como el SOP (Síndrome del Ovario Poliquístico) y la endometriosis.

Los carotenoides, también los receto porque actúan en el envejecimiento celular, la piel...

¿Qué otro consejo nos podría dar para conservarnos más jóvenes durante más tiempo?

Según varios estudios, se ha demostrado que el ambioma es importantísimo para mantenerse joven durante más tiempo. Es el relacionarse con la sociedad de manera proactiva y positiva, tener buenas relaciones familiares, de pareja, de amistad.

Hay lugares en el mundo donde viven las personas más longevas del planeta, son las conocidas Blue Zones (Cerdeña, en Italia; la isla de Okinawa, en Japón; Loma Linda, en California; la Península de Nicoya, en Costa Rica e Icaria, una isla de Grecia). Las personas que viven más de 100 años suelen ser más vitales, con ilusiones y tienen una actitud más positiva frente a la vida.

Tomamos nota…