La paradoja del abuelo fue una de las primeras paradojas acerca del viaje en el tiempo que se formuló y se publicó en la novela de Le voyageur imprudent (El viajero imprudente) escrita en 1943 por el escritor francés de ciencia ficción René Barjavel.

No obstante, ha servido y ha sido utilizada como modelo por los actuales astrofísicos para explicar las posibles implicaciones teóricas del viaje del tiempo a los no tan expertos.

Se parte del supuesto de que el personaje realiza un viaje a través del tiempo para matar al padre biológico de su padre. O sea, a su abuelo. Antes de que éste conozca a su abuela. O sea, a la madre biológica de su padre. Evitando que estos: abuelo y abuela, formen pareja, se casen y se pueda llegar a concebirlo a él. Viajero a través del tiempo.

Es aquí que se formula la paradoja. Si el viajero del futuro nunca fue concebido en el pasado, entonces, nunca pudo haber partido del futuro. Porque el futuro no es más que la continuidad de los eventos y realidades ocurridas en el pasado.

De nuevo entonces: ¿cómo resolver la paradoja sin entrar en una retro causalidad?

Recuerde que el espacio-tiempo es un continuo. Esto es, las partículas y la materia se mueven a través del espacio-tiempo siempre hacia adelante; es decir, hacia el futuro.

Eso es una consecuencia física directa de que la energía y la masa son positivas.

Pero resulta que la mecánica cuántica permite un cambio de signo en el tiempo. Sin violar las leyes de física, en lo que se conoce como una curva cerrada de tipo tiempo.

Y por extraño que parezca, la física teórica también permite, más bien, admite, la posibilidad de la existencia de masa negativa. Y como todos conocemos, a través de la famosa ecuación de Einstein, E=mc², masa y energía son equiparables e intercambiables.

De hecho, tanto la física teórica como la física (mecánica) cuántica permiten, teorizan y admiten la posibilidad también de la existencia de una energía negativa.

¿Es acaso la energía oscura que acelera la expansión del universo, el resultado de una energía negativa que genera una fuerza gravitacional repulsiva? ¡Podría ser!

Según el físico inglés Stephen Hawking, las leyes de la Física son tales que impiden el viaje en el tiempo en cualquier escala que no sea sub-microscópica. Así lo formuló en su conjetura de protección de la cronología. En la que Hawking advierte que «la mejor demostración de dicha imposibilidad es que en la actualidad no estamos siendo invadidos por turistas venidos del futuro».

No obstante, puede haber otra explicación, también demostrable, que permite la aparición de curvas temporales cerradas, sin que, la Agencia de Protección de la Cronología se entere de ello. Y de ese modo, hacer un Universo alternativo para los historiadores. Sin necesariamente entrar en una realidad o realidades de universos paralelos.

Y esa es que la realidad y el Universo siguen la flecha del tiempo. Y esa es precisamente la solución a nuestra paradoja. ¿Por qué? Porque la más importante, indiscutible y determinante, característica del tiempo es su irreversibilidad.

En otras palabras, «sí un evento existiese y provocase una paradoja o cualquier cambio en el pasado que la provoque, entonces la probabilidad de ese evento es cero» (Principio de autoconsistencia de Nóvikov).

Así las cosas, si usted viajó al pasado, a intentar matar a su abuelo, simple y sencillamente, el Universo y la realidad no sólo harán que usted falle en su intento. Harán que le sea imposible siquiera conocerlo o transmitirle que usted es su nieto.

¡Dos realidades que se contraponen no pueden coexistir en un mismo espacio-tiempo!