El 19 de septiembre se ha convertido en una fecha fatídica para la historia de México. Dos de las mayores catástrofes naturales que han azotado al país han tenido lugar ese día.

19 de septiembre de 1985

Todos los años, el día 19 de septiembre se conmemora el aniversario del terremoto que sacudió México una mañana trágica de 1985. Dicho sismo ha sido el más destructivo y mortal en la historia de nuestro país. Tuvo una magnitud de 8,1 en la escala de Richter y, de acuerdo al Instituto de Geofísica de la UNAM, tuvo una duración de casi cuatro minutos, de los cuales, 90 segundos fueron los de mayor intensidad. Sin duda fueron unos minutos que se sintieron una eternidad.

Se calcula que la energía que generó este terremoto es el equivalente a 30 bombas atómicas. Así podemos tener una mejor idea de la magnitud del desastre que ocasionó.

Se perdieron miles de vidas, hubo centenares de desaparecidos y heridos, edificios públicos y privados y muchísimas casas destruidas. Se calculan unos 5.000 de dólares en daños materiales.

Fue un día que paralizó por completo al país y que aún duele. Esta es una fecha que nos marcó a todos los mexicanos, en la que demostramos toda la solidaridad de la que somos capaces. Durante esos días, fue la población en general la que salió a las calles para participar en los rescates, moviendo escombros, buscando víctimas atrapadas, dando alojamiento y comida a los damnificados y ayudando tanto como fuera posible. La comunidad internacional también se hizo presente y fue de mucha ayuda.

Por ello, cada año se conmemora esta fecha con ceremonias y simulacros, con el fin de concienciar a toda la población y prepararnos para afrontar una emergencia como esta tanto como sea posible y sepamos cómo actuar y, sobre todo, tener ubicados las rutas más seguras durante un sismo.

19 de septiembre de 2017

El pasado martes 19 de septiembre, por la mañana, al igual que todos los años se realizaron los respectivos simulacros y ceremonias de conmemoración del terremoto de 1985. Lo que no imaginamos fue que lo aprendido en los simulacros lo tendríamos que llevar a cabo muy pronto.

Mientras realizábamos nuestras actividades cotidianas, fuimos sorprendidos nuevamente por una fuerte sacudida: un sismo de magnitud 7,1 grados la escala de Richter. Eran las 13:14, un horario en la que la mayoría de las personas estábamos trabajando, mientras los jóvenes y niños se encontraban en la escuela.

Ya pasó más de un mes desde este sismo, y se calcula que los daños que dejó en el país son: 369 muertos, 1.900 heridos; aproximadamente 12 millones de afectados; dos millones de damnificados; 16.000 escuelas dañadas: 13.000 pequeños y medianos negocios afectados. De las perdidas materiales poco a poco el país saldrá adelante nuevamente, pero las heridas emocionales que dejaron las perdidas humanas se quedarán ahí.

19 de septiembre, no se olvida

Mismo día pero 32 años después, un sismo sacude México. Pero con la diferencia de que ahora en algunos lugares se cuenta con alarmas sísmicas, lo que da algunos segundos a la población para poder evacuar y buscar un lugar más seguro. Ahora somos una población más consciente y los simulacros nos han ayudado a saber cómo actuar ante estos hechos, ahora existe una cultura de protección civil que antes no se tenía. Gracias a esto pudieron salvarse muchas vidas.

Los avances en la comunicación fueron una gran herramienta durante el sismo. Gracias a los teléfonos celulares o móviles y redes sociales pudimos estar en constante comunicación para estar en contacto con nuestros familiares y amigos más cercanos y sobre todo saber en tiempo real lo que estaba pasando y en donde se necesitaba la ayuda inmediata. Nuevamente la población civil demostró su solidaridad y miles de personas salieron a las calles para ayudar. A un mes de este sismo, la ayuda sigue estando presente y se necesitará de ella un tiempo largo para ayudar a volver a la cotidianidad a los afectados. Aunque su vida ya no será como antes, perder la vida de seres queridos y su hogar es algo que jamás se podrá reemplazar.