Las termas de Caracalla, o termas Antoninas, fueron unos baños públicos de la Roma imperial. Se construyeron entre 212 y 217 d. C., bajo el gobierno del emperador Caracalla. Actualmente, las extensas ruinas de estas termas son una de las grandes atracciones turísticas de la capital italiana. Aunque fueron despojadas de sus esculturas y demás riquezas desde fecha temprana, se conservan aún grandes fragmentos de mosaicos, algunos de ellos correspondientes a la planta superior del edificio, que se desplomó.

Este espléndido marco será de nuevo este año el escenario de la temporada de verano del teatro de la Ópera de Roma. La programación se abre el 23 de junio con el Cuerpo de Baile del Teatro de la Ópera en Pink Floyd Ballet, con la coreografía de 1972 de Roland Petit. El espectáculo también incluye La rose malade, con música de Gustav Mahler.

La parte central del verano está totalmente dedicada a la ópera. Del 6 de julio al 3 de agosto (jueves 9 de julio, 21:00 horas; martes 14 de julio, 21:00 horas; jueves 16 de julio, 21:00 horas; jueves 30 de julio, 21:00 horas; jueves 6 de agosto, 21:00 horas) se representa Madama Butterfly con la coreografía de Alex Ollé, de La Fura dels Baus, y el cuerpo de baile del Teatro de la Ópera.

Del 15 de julio al 8 de agosto (sábado 18 de julio, 21:00 horas; lunes 20 de julio, 21:00 horas; viernes 24 de julio, 21:00 horas; martes 28 de julio, 21:00 horas; viernes 31 de julio, 21:00 horas; martes 4 de agosto, 21:00 horas; sábado 8 de agosto, 21:00 horas) se representa Turandot con la dirección de Denis Krief.

Del 25 de julio al 7 de agosto se representa la Bohème de Davide Livermore, que ambienta la historia de los dos amantes de París entre los grandes cuadros de los pintores impresionistas. Dirige Paolo Arrivabeni.

La tan apreciada cita con la danza con Gala Roberto Bolle será el 27 de julio.