Cuando Macarena Olona dijo que se retiraba temporalmente de Vox por una causa personal, pensé «no, otra vez, que triste». Como politóloga y periodista el análisis es fácil y es que siempre que una mujer inteligente, con carisma y con mayor relevancia que el líder del partido se dispara en la opinión pública, lo siguiente es la decapitación. Y de pronto, la estrella rutilante Olona desafía a Vox tres meses después presentando en la capital la Fundación Igualdad Iberoamericana. Vaya, suena a combatir la ideología de género, la abogada del Estado inicia su particular cruzada contra la cocinita de juguete de Irene Montero y sus leyes feministas sin sentido.

Ella, que fue la candidata de Vox en las elecciones andaluzas, que superó todas las expectativas del partido, es consciente de la expectación que genera tras denunciar el «maltrato» dentro de su expartido y la falta de democracia interna. En julio se fue por razones médicas, y ahora vuelve lanzando al aire y entre risas que hará tambalearse el tablero político. Sepárate, Macarena, un pasito atrás y te verás a ti misma siendo más grande que el mismísimo Santiago Abascal, ya has tambaleado el tablero, hace rato.

«He sido muy clara, no voy a concurrir a las próximas elecciones autonómicas y municipales con una candidatura propia», aclaró en el Palacio de Linares, sede en Madrid de la Casa América. Tanto en su intervención como en las respuestas a la prensa, Olona dejo claro que su expartido es una cesta de víboras, eso sí, diferenciando los diputados rasos y militantes de base, de la dirección, que pasarían a un upgrade de boa constrictor.

Entre los asistentes a su puesta de largo estaba Ricardo Morado, excandidato de Vox en las elecciones gallegas. «Conservo grandes amigos, compañeros y simpatizantes de Vox. Lo que ven es un ataque muy injusto porque yo sigo siendo la misma», aseveró Olona, antes de admitir que no ha vuelto a hablar con Santiago Abascal ni con el resto de los dirigentes del partido. De paso, aclaró fake news lanzadas por Vox, como que tenía financiación de Irán y Venezuela. Puestos a inventar podrían ser un poquito más originales y pensar en otros países que no hayan financiado a la extrema izquierda. Los 10,000 dólares necesarios para poner en marcha la fundación dice Olona que los ha puesto de su bolsillo.

«La intranquilidad es para quienes han deseado que me marche con la cabeza gacha a mi casa. Lamento generarles inquietud porque no me marcho a casa», otro de los cuchillos de la presidenta de la Fundación Igualdad Iberoamericana. Su iniciativa legislativa popular contra la ideología de género debe conseguir 500,000 firmas en un máximo de nueve meses, una vez registrada la iniciativa en el Congreso, para que se permita su tramitación. Después, la Mesa de la Cámara Baja dispone de seis meses para llevar al pleno el debate de esta ley, siempre que se alcancen antes las firmas. Olona dijo que pretende hacer frente a la «criminal ideología de género» contando con «47 millones de españoles frente a los 573 millones de euros del Ministerio de Igualdad».

Y es que esta ingeniería ideológica del feminismo y la ley de violencia de género se ha convertido en un abuso de mujeres perversas, y ahora desprotege al hombre inocente, tanto como a la mujer maltratada. Llegando a la conclusión de que los protocolos de detención policial, basados en la mayoría de las ocasiones en la mera denuncia de la denunciante, constituye una vulneración de la presunción de inocencia. Ya que, si se basa una detención en el género de las partes, sin valorar si se cumplen los requisitos mínimos para proceder a la misma, en cierto modo se está dando por hecho que el delito se ha cometido.

El acto de presentación de la fundación de Olona empezó con un vídeo sobre la historia de un padre separado de su hija por una denuncia falsa que ahora vivía en la calle. Es una historia ficticia, «pero es la historia de millones de familias». El propósito de la presidenta es unir la hispanidad en una sola voz contra el feminismo. Y así David ganó a Goliat, Macarena le está ganando la partida a gran guerrero de Vox, con su mismo lenguaje, la defensa de la familia, la defensa del hombre, del bienestar, la exterminación de ideología de izquierda. Que Olona puede caer mejor o peor, pero que ya no es necesario que Santiago Abascal nos libre de las hordas del feminismo impuesto por el actual gobierno.

Y todo empezó cuando nuestra mujer se hizo amazona, con la intervención estelar de Macarena en el Congreso sobre el caso Pegasus. Cuando ella hacía mofa de los separatistas, «¿Cuál es el problema? ¿Qué les han espiado? Poco, poco les han espiado». Esta intervención corrió como la pólvora por WhatsApp. Entonces todos dejaron de ver únicamente a Santiago, a Smith, y sus acólitos, muchos españoles fueron consciente, seguramente por primera vez, de Olona, esa diputada de Vox. Un líder político no espera ser amado por la totalidad, lo que si espera es ser visible y recordado.

Olona era muy visible y recordable, muy inteligente, abogada del Estado, atractiva, correcta, todo esto suma. Lo digo porque he oído innumerables veces que la señora Montero era cajera de supermercado, que la tesis de Sánchez es comprada, que Cifuentes aprobó sin presentarse a los exámenes… desgraciadamente la sociedad y los medios de comunicación pueden hacer que un frasco de Pato WC tenga mejor reputación. Considero que cualquier trabajo que te permite vivir es digno, del color que sea, pero la política actual no es precisamente la versión de un grupo de hombres y mujeres preparados para defender los derechos de los votantes, se parece más a la Feria de Abril de Sevilla, si accedes y osas vivir del cuento… no es tan importante tu preparación académica como pasearte por el albero del Congreso con el modelito de lunares y la sonrisa de «estamos de fiesta».

Macarena no solo tiene un perfil alto, transmite credibilidad, eso que en comunicación no verbal se llama no atender a lo que te dicen, sino a quién lo dice. Ignoro si miente, pero analizo su carisma, esto le pasa a Cayetana Álvarez de Toledo, también a Yolanda Díaz, incluso a Ayuso. Te pueden gustar más o menos, pero no dan la impresión de leer el texto, bueno con Yolanda tenemos que hacer alguna excepción cuando explicaba en la pandemia qué era un ERTE.

Al líder de un partido no le gusta que una persona por debajo le haga sombra, la jerarquía es férrea y vertical. En los partidos extremos y totalitarios como Vox o Podemos las formaciones originales suelen desaparecer. Si la política se personaliza en una persona preparada se entiende que la consecuencia es una buena propuesta política. Aunque eso no garantiza que te guste, pero al menos será una garantía. Y Macarena rápidamente se hizo con la fama de ser una garantía. El votante no vota a un programa, porque todos sabemos que no se cumple, y en ocasiones ni el candidato conoce todas sus propuestas porque son diseñadas por el gabinete de comunicación, ordenado a su vez por el director o directora de campaña. Y si a eso le unes lo que escuchas en la calle, si, eso tan profundo de «yo le he votado porque es el más guapo», o aquello de «me encanta como viste»… ¿Hola?, esto es el Tinder.

Macarena ya tiene el kit, escudo, lanza, espada y caballo, está sobradamente preparada para formar un partido político, y su primer paso tiene una lectura política clarísima: si la iniciativa se tramita en tiempo y forma el año que viene defenderá en el pleno del Congreso ante su expartido su defensa en contra de la ideología del Ministerio de Igualdad. El kit lo va a necesitar porque tiene que convencer en nueve meses y recabar medio millón de firmas y conseguir superar todas las condiciones jurídicas para aprobar la iniciativa popular.

En su recogida de apoyos por toda España, Olona no tendrá que ponerse los pendientes de lunares, esos que dan mucho color y despistan de lo que te dicen, tampoco va a necesitar claveles en el pelo, ella simplemente puede ser ella, ofreciendo conferencias sobre derecho constitucional para recabar firmas. Ella le ha quitado la bandera de la lucha contra la ideología de genero a Vox. Llegados a este punto, tengo que avisar al lector que nuestra resucitada Olona plantea su lucha como apolítica, con eso tan bíblico del bien contra el mal. No, too late, ya sabemos que el Ratoncito Pérez son los padres, subestimas al personal Olona, tu fundación es una patada en el estómago para la ministra de Igualdad, para el gobierno del PSOE, para tu examigo Santiago Abascal, para Ciudadanos que sigue defendiendo ser la centroderecha. Tu flecha de la fundación ha dado de lleno en el corazón del espectro político.

Macarena, tu fundación es universal, bien, la lírica siempre se agradece, pero bajémoslo a la realidad para descubrir tu estrategia, ¿eres tan inteligente que harás tu campaña electoral sobre un partido que todavía no existe escudada en la defensa del hombre contra una ley injusta?