El Museo Nacional de Bellas Artes de La Habana exhibirá hasta el 27 de noviembre una collección de obras del pintor italiano Caravaggio, definido como el iniciador del barroco. La muestra tiene como obra protagonista el Narciso en la fuente, cuadro emblemático de ese renovador del arte universal, y otros 12 óleos de sus seguidores no sólo italianos, lo que indica, según Vodret, su curadora, que la influencia del pintor alcanzó casi toda Europa.

Es la primera vez que un cuadro emblemático de Caravaggio llega a Cuba. Se trata de una iniciativa auspiciada por el Ministerio de Bienes y Actividades Culturales de Italia, entre otras instituciones de ese país, una iniciativa cultural que Roma entiende como su forma de acompañar los cambios en la isla. Además sus organizadeores dicen que la exposición fue "diseñada especialmente para Cuba". Por cierto se trata de una iniciativa que gracias a los esfuerzos de las instituciones, empresas y sectores de la sociedad civil en las dos naciones, asegurará que con ello se desarrollarán históricos lazos de amistad.

La muestra, que terminarà el 27 de noviembre, fecha en que se inicia la semana de la Cultura Italiana en Cuba, deslumbrará a los amantes de la pintura. Los visitatores serán atraídos por el juego de luz y oscuridad absoluta que logra Caravaggio sobre el joven pescador que se contempla en el agua y se enamora de él mismo. Muchas personas la visitarán porque Caravaggio es innovación, profesionalismo y rebeldía, valores que las cubanas y cubanos aprecian.