Como cada enero, comenzamos el año y el mes con las esperadísimas rebajas tras el periodo de la Navidad. Hay que saber gestionar muy bien el presupuesto que queremos destinar para buscar chollos. Por eso, tenemos que estar muy atentos y no dejarnos llevar solo por impulsos.

Por eso, para sacar el máximo partido a las rebajas, el primer paso será destinar un presupuesto fijo para invertir en las rebajas. De este modo nos ayudará a no tirar el dinero en cosas innecesarias. Y además la tentación también será menor. Hay que huir de comprar por comprar. Muchas veces vemos 4,99€ en un vestido que costaba 14,99€ y el precio nos llama a comprarlo. Tenemos que tomárnoslo con calma y no convertirnos en compradores compulsivos.

Continuamos haciendo una lista de las cosas que verdaderamente necesitamos: aquellas prendas que has estado esperando hasta las rebajas para comprarlas y así ahorrar unos eurillos. Porque... ¿realmente compramos lo que de verdad necesitamos? No caigas en los caprichos, y si es así ponte un límite máximo tres prendas. Hay que tener en cuenta siempre cuándo lo vamos a usar.

Para ello, debes saber muy bien qué cosas son prioritarias frente a las que no.

En muchas ocasiones, nos volvemos tan locos con los mini precios que no hacemos caso u olvidamos si son necesarios o no.

No debemos nunca olvidar que la ropa de temporada es la que antes se agota. Mi consejo es ir antes por las tiendas y echar un ojo. Y en los primeros días de rebajas ir, porque, sin duda, es lo que primero se va a acabar.

Tenemos que probarnos la ropa antes de comprarla. Muchas veces nos desesperamos con las largas colas en los probadores y nos autoconvencemos de que si no nos queda bien, la devolveremos. Pero esto casi nunca es así. Y terminamos teniendo algo que ni nos convence. Ah, y eso de comprar otra talla que no sea la nuestra, jamás de los jamases porque no la usaremos, ya que nos estará pequeña o grande. Oídme: hay que comprar siempre cosas de vuestra talla.

La rebajas son el mejor momento para hacernos con un buen fondo de armario, ya sea un vestido negro, una camisa blanca, una americana…

Hay que ver siempre la oportunidad y comprar ropa de la siguiente temporada, más rebajada. En verano, por ejemplo, con el calor vemos ropa de abrigo y huimos de ella, pero realmente es la mejor oportunidad para comprar prendas básicas de invierno a un precio increíble, además la gente no suele hacerles caso, estad atentos.

Lo que tenemos que buscar son las gangas, pero no hay que confundirse con las taras o ropa de menor calidad. Algunas tiendas aprovechan para sacar del almacén lo que otros años no han vendido. Tenemos que estar atentos y saber que incluso hay outlet que venden esto todo el año. No es el momento de comprarlo en rebajas. Recuerda siempre hay que comprar cosas de la temporada que sean auténticas gangas.

Debemos ir cuando menos gente haya, porque encontraremos lo que buscamos y no nos estresaremos con largas colas y desorden por todos los lados. Evitemos la hora punta.