El oráculo de la noche es la exposición individual de la artista colombiana María Isabel Rueda. A lo largo de su carrera, Rueda ha construido un cuerpo de obra en el que lo visual y lo racional se entrelazan con lo onírico, lo metafísico, las supersticiones y lo intuitivo. Esta muestra celebra las múltiples dimensiones de una de las voces más versátiles y conceptualmente ricas del arte contemporáneo colombiano.
Un universo entre sombras y visiones. El título El oráculo de la noche alude tanto al contenido como al enfoque metodológico de la exposición. En la penumbra, la artista invoca espectros, presagios y criaturas oraculares, en murales monumentales que dialogan con la luz, la sombra, la realidad y la ficción.
Cine experimental desde el sueño. Las obras La sombra del ciruelo (2025) y Aquella noche única perdida ya (2025) nacen de sueños, pesadillas y desvelos personales. Cactus, vírgenes malignas y paisajes caribeños componen un relato íntimo, no lineal, profundamente marcado por el entorno vital de la artista.
De los vampiros al sol. Vampisol (2003-2025) es una serie inédita derivada de Vampiros de la sabana (2003), que presenta emulsiones accidentales y psicodélicas causadas por el clima caribeño. Las imágenes evocan test psicológicos tipo Rorschach, donde la interpretación subjetiva reemplaza a la narrativa documental.
Emma Reyes, presencia y homenaje. Como una de sus influencias centrales, la figura de Emma Reyes (1919–2003) está presente en la muestra. En diálogo con el libro Los sueños de Emma Reyes, se incluyen obras de la artista como homenaje.
El oráculo de la noche propone una experiencia sensorial y conceptual que desafía las fronteras entre el arte y el sueño, la razón y la intuición. María Isabel Rueda invita al espectador a sumergirse en un mundo donde lo invisible cobra forma, y donde cada obra es un mensaje cifrado desde lo más profundo de la imaginación.