Paraíso terrestre, tierra de aventuras y de exploración, mundo hostil y salvaje... Frente a lo desconocido y lo extraño, los escritores, pensadores y artistas europeos desarrollaron tempranamente un imaginario colmado de ambigüedades: los estereotipos se mezclaban con los deseos de exotismo y aventura; el romanticismo se combinaba con los lugares comunes.

La exposición analiza la evolución de esta visión, desde las narraciones de viajes de Cook y Bougainville hasta nuestros días, utilizando la literatura para jóvenes y la producción cultural destinada a los niños - juguetes, películas, exposiciones universales, museos o dibujos animados - como terrenos de exploración.

Nos encontramos con Robinson Crusoe y su compañero Viernes, La Familia Fenouillard embarcada contra su voluntad en un viaje en América Phileas Fogg y Passepartout, y otros héroes coloniales y aventureros como Bob Morane, Dady Risquetou, Freddy la Bougeotte… Narraciones que, a pesar de evocar eventualmente la nostalgia, constituyen ejemplos edificantes de la diversidad de la imaginería occidental que acompañó a los pequeños curiosos en su descubrimiento del mundo.